Cuando me preguntáis un poco incrédulas, si creo que podréis conseguir una producción de leche materna suficiente para vuestros gemelos es habitual que me detenga a explicaros un poco sobre el mecanismo de producción de la leche materna. Es un poco largo de contar y espero no aburriros, pero es necesario que lo entendáis para que crezcáis en confianza y seguridad.
¿Qué vas a encontrar en este post?
Nota aclaratoria sobre la función del pecho
Fisiología de la producción de leche materna
Para fabricar leche materna necesitas dos pechos, y de momento salvo rarísimas excepciones, los vas a tener. También requieres de un sistema hormonal y glándulas, como la hipófisis, en perfecto estado de funcionamiento. Por último necesitamos un bebé o varios que mamen frecuentemente, bajo una demanda irrestricta, y con un vaciado eficaz de la leche materna.
En otra entrada ya te he explicado cómo es el pecho por dentro. No está de más que te la releas si quieres entender algunos conceptos de los que hablo en este artículo.
Cuando nacemos nuestra glándula mamaria humana no está desarrollada por completo. Para poder cumplir su función primaria de amamantar y proporcionar leche al bebé el pecho pasa por unas etapas de desarrollo en las que poco a poco se prepara para la producción de leche materna, que se verá en otra entrada.
Cuando el pecho está ya listo y todas las células epiteliales están diferenciadas para la empezar a secretar leche, el pecho empieza a absorber todo lo necesario para la producción de leche a partir de la sangre que llega hasta los lactocitos, que son las células que recubren los alveolos por dentro, y donde se producirá la síntesis de los diferentes nutrientes que conforman la leche materna a través de cinco vías diferentes.
La leche producida se acumula en los sacos alveolares hasta que las células mioepiteliales que hay alrededor de ellos lo contraen gracias a la hormona oxitocina y con el reflejo de eyección de la leche se vierten a los conductillos y conductos, por donde se transporta hasta la salida por las aperturas situadas en el pezón.
Las hormonas responsables de la lactancia materna son la prolactina, la oxitocina y otras menos conocidas aunque no menos importantes, como el cortisol, la insulina, hormonas tiroideas y factores de crecimiento. También hay una proteína que se conoce con el nombre de FIL que participa activamente en la producción de leche.
#1.Inicio de la activación de la secreción de pre calostro
La secreción de leche pre calostral puede empezar a pasar tan pronto como a partir de las 16 semanas de gestación, y al final del embarazo puedes llegar a producir hasta 30 ml de sin darte cuenta. La hormona Prolactina es la responsable de la síntesis de leche materna, va aumentando su producción y está muy alta poco tiempo antes de dar a luz, pero frenada por otras hormonas para proteger al bebé que se está gestando.
#2.Alumbramiento de la placenta y calostro
En el parto después del bebé se expulsa la placenta, y entonces la prolactina que antes estaba frenada, se eleva de forma muy brusca con las succiones, junto con una gran cascada de oxitocina del nacimiento, y empezará a trabajar en una mayor producción de leche materna tan pronto como se eliminen de la sangre los restos de hormonas que frenaban la lactancia.
Todas las madres tienen calostro durante estos días, es la primera vacuna del bebé. Se produce en cantidades pequeñas hasta la subida de la leche. Esta transición sucede así por algo. El bebé tiene que adaptarse a tragar fuera del vientre de su madre, ya que dentro ya lo hacía en grandes cantidades, pero sin riesgos de aspiración. En cambio ahora, con una respiración pulmonar, el bebé tiene que coordinar de forma perfecta la succión, la deglución y la respiración y demasiada cantidad de leche podría suponer un problema.
Las pequeñas cantidades de calostro, que es la leche del recién nacido, le permiten ir probando este mecanismo de alimentación nuevo y gracias a su práctica, al tercer día ya se siente seguro para hacerlo sin riesgos de la lactancia.
#3.Subida de la leche y succión del bebé
El inicio de la secreción copiosa, o subida de la leche, se producirá sobre las 30-72 horas después del parto, cuando ha desaparecido completamente de la sangre las hormonas placentarias que frenaban la producción de leche materna masiva.
A partir del tercer día el incremento de leche es notable y podemos verla y sentirla cuando maman los bebés. A partir de aquí la fabricación de la leche se mantiene sobre todo por el estímulo local de cada pecho.
#4.Calibración del volumen de leche a través de la autorregulación del apetito del bebé
Durante las primeras seis semanas el pecho produce leche de forma independiente al peso y talla del bebé o sus necesidades. Está un poco perdido y necesita que le den señales para poder regularse. Es necesario que alguien le diga cuánto tiene exactamente que producir, y es el bebé quien le marca el ritmo.
Esto quiere decir que, igual que puede haber mucha leche, puede haber menos de la que se espera, por eso para poder compensar es necesario que el bebé esté piel con piel y en contacto con su madre la mayor parte del tiempo, para conseguir la leche que necesita en cuanto lo requiere.
Esto permite que se desarrollen los receptores de prolactina, unos superficies necesarias para permitir el paso de la prolactina a los lactocitos, y así fomentar una mayor producción de leche materna a largo plazo. La liberación de oxitocina en respuesta a la estimulación del pecho continua hace que la leche salga del pecho y gracias al ordeño por parte del bebé de forma correcta la glándula mamaria se va drenando.
#5.Mantenimiento de la producción de leche
Durante las primeras semanas es de gran importancia que el bebé se ponga al pecho de forma muy frecuente y que éste succione bien. Si el pecho no se estimula todo lo suficiente, frecuente y eficazmente que se requiere empieza un proceso de regresión o involución mamaria, interrumpiéndose gradualmente la producción de leche materna por la activación de una proteína llamada Factor de Inhibición de la lactancia (FIL).
#6.Hormonas implicadas en la fabricación de leche
La Oxitocina es una hormona que durante la lactancia se segrega principalmente por estímulo del pezón, que envía el mensaje al cerebro y desde allí llega la orden a la hipófisis posterior para liberar la hormona que exprime el pecho de forma interna sacando la leche materna de los lactocitos. La liberación de oxitocina depende del estado emocional de la madre, si está tranquila y relajada o está incómoda, siente dolor o tiene preocupaciones, dudas e inseguridades. Es facilitada por el contacto piel con piel con el bebé y hay factores externos que condicionan su liberación, como el llanto del bebé.
La prolactina sintetiza la leche materna a partir de la sangre y se segrega por la hipófisis anterior con la presencia de succión. En el momento del inicio de la toma los niveles de prolactina son más bajos que cuando la toma finaliza. La cantidad de prolactina depende de la cantidad de estímulo que recibe el pezón del bebé/s después del cuarto día posparto.
Si el bebé mama bien se drena el pecho de forma suficiente, lo que es la garantía de la continuidad de la lactancia. Si el pecho no se drenara eficientemente la proteína FIL se activaría disminuyendo la producción de leche materna y la velocidad de su síntesis. Esto puede pasar cuando el bebé no mama bien, o mama de forma insuficiente.
Por último y muy importante, cuando el pecho se drena bien se desarrollan los receptores de prolactina que son los lugares de paso de la prolactina hacia los lactocitos y que se incrementan con la succión frecuente, eficaz y precoz del pecho. Hay una ventana de tiempo crítica para que se desarrollen la mayor cantidad de receptores de prolactina, que suele ser de unas 2 a 3 semanas. Después de este tiempo es imposible recuperar o producir más receptores.
Capacidad de autorregulación del apetito del recién nacido
Pues me alegro mucho.
Muy bien explicado, me sirvio para mi tareaa…