¿Crees que con la intención y las ganas es suficiente para poder empezar una lactancia con gemelos?
Esto es lo que muchas mujeres piensan después de despertar del shock de la reciente noticia de que van a tener dos bebés.
Presuponen que con una firme convicción y resistencia personal una lactancia materna de estas características será fácil de llevar a cabo, a pesar de que una inmensa mayoría lo vea como algo imposible y difícil de alcanzar.
Y con ese ánimo se sienten pletóricas por lo que les ha dado la naturaleza, y confiando que con dos pechos es suficiente, y que valen más dos tetas, que dos carretas, no consideran algunas cosas que pueden poner en peligro su objetivo de amamantar a dos en las primeras semanas.
Y fue exactamente lo que me pasó a mí en mi primera lactancia. Creía que lo sabía todo, y que con mis ganas y arrojo, la lactancia sería coser y cantar.
La realidad a la que me enfrenté es que no sabía absolutamente nada, y que si hubiera sabido de estos errores antes otro gallo habría cantado y mi lactancia habría sido floreciente, porque con los segundos fue así porque yo me proporcioné todo lo que me faltaba.
Hoy te lo acerco a tí, para que no te pille de sorpresa.
¿Qué vas a encontrar en este post?
Error 1. “No necesito ninguna preparación especial, con ir a la preparación al parto es suficiente”
Si piensas que la preparación al parto que pueden ofrecerte en la Seguridad Social o en un Centro Privado de los más caros, originalmente pensada para todas las madres, es suficiente para prepararte para afrontar una lactancia de estas dimensiones, estás equivocada.
En realidad, de lactancia materna se habla poco y quizás, lo que más escuches es sobre los beneficios y ventajas, pero de práctica, más bien poco.
Por lo menos en mi caso fue así. Además de algunos mitos que me brindaron ya con la segunda preparación, que pensaba que sería mejor.
La de veces que me han dicho las madres en mis visitas en sus casas, ya con los bebés nacidos y mamando ¿por qué esto no me lo enseñaron en la preparación al parto?
Eso me gustaría saber a mí. 😉
En realidad, no hay que saber mucho de beneficios y ventajas, tan solo por sentido común piensa que si estamos aquí no es por la leche de fórmula, sino por la leche materna.
¡Ojo! Hablo de millones de años, no de los últimos 50.
Tendrás suerte si tu matrona es de las que tienen una preparación en la que las clases se ofrecen de forma continua y se van incorporando nuevas madres mientras salen otras, y puedes coincidir con las madres recientes.
Con un poco de suerte las verás amamantando. Pero no es una garantía.
Incluso puedes ver a más madres con biberón. Y aquello te hunda más en la miseria. ¡Y tú pretendiendo amamantar a dos!
Y por supuesto, todo esto contando con que acudirás a la preparación mucho antes que el resto de las madres con un sólo bebé, por el riesgo de la prematuridad.
¿Qué puedes hacer?
Tendrás que buscar con mucho tiempo de antelación qué preparación para la lactancia puede acomodarse mejor a tus necesidades si quieres amamantar a dos, porque no en todos los lugares vas a encontrar esto.
Estudiar bien el temario de lo que te tienen preparado en el centro, si atienden muchas madres de gemelos, o las forman de una manera específica.
Siempre puedes preguntar, porque preguntando se llega a Roma, y ser cansina, muy cansina, dentro del mismo grupo que te toque, a ver si con un poco de suerte, en la siguiente sesión responden tus dudas.
Error 2. “No acudir a los grupos de apoyo a la lactancia porque aún no tienes a los bebés y hay tiempo de sobra, o porque nadie te ha contado que existen reuniones así”
Como ves, con la preparación al parto te quedas bastante corta de lactancia materna en general.
Así que si hablamos de lactancia materna con gemelos ni te cuento lo que te han contado.
Para que te hagas una idea, en el 2006 estos datos los recogí de una muestra de unas 105 madres con hijos nacidos de partos múltiples.
Un 35 % de las madres reconoce haber tenido ni mucha ni poca información sobre la lactancia materna con gemelos, y un 18.75% nada de información sobre este tipo de lactancia.
Sondeo Multilacta 2006 sobre lactancia materna con partos múltiples.
Así que lo lógico es que puedas acudir a otros espacios en donde se pueda completar ese vacío, y nada mejor que los grupos de apoyo a la lactancia materna.
Si además encuentras uno que especialmente está especializado en lactancia materna con múltiples ya es la repera.
Pero no me voy a poner exigente. Basta que sea un grupo de apoyo, ya estaría genial.
Lo más seguro es que no te hayan contado nada sobre ellos en esa preparación al parto, pero con solo buscar en Google “ayuda lactancia materna“ que seguro que acabas encontrando algo así.
Los grupos de apoyo de lactancia materna entre madres son espacios donde nos encontramos para poder compartir y hablar de nuestras lactancias y aprender justas sobre la cultura del amamantamiento, adquiriendo habilidades especiales para la gestión de la lactancia.
No es la primera vez que una futura madre me dice que como todavía no tiene a los bebés, no sabe si tiene que venir ahora o cuando los tenga.
Ahora es el momento ideal, y sino, cuanto antes después del parto.
¿Entonces, qué hago?
Si vienes a los grupos podrás ver amamantar a otros bebés y hacerte una idea de cómo es colocar a un bebé al pecho y poder saber cómo hacerlo tú cuando tengas a tus bebés contigo.
Porque no es necesario que los pongas obligatoriamente al mismo tiempo, sino de uno en uno.
Pasito a pasito.
Y cada vez que acudes al grupo, aprendes un poco más, y puedes ver incluso a alguna madre de gemelos hacerlo.
En mis grupos de Coslada – Madrid, por lo menos.
Y encima, son gratis.
Error 3. En el hospital ya me irán enseñando todo lo que necesito saber para empezar.
Me encantaría que fuera así, que todos los profesionales con los que te encuentres en el ingreso para el parto estén capacitados y preparados para darte las mejores condiciones en el inicio de esta lactancia y no fuera todo tan incierto.
Entonces habríamos conseguido algo grandioso.
Lamentablemente, no siempre encontrarás todo a pedir de boca.
Con unos tendrás suerte, con otros te preguntarás qué interés les mueve realmente y si les paga alguien de la industria por decirte que con la fórmula iréis mucho mejor.
Es una pena, pero sí, demasiadas veces es en el mismo hospital donde más se cuestionan tus competencias para dar el pecho a gemelos y la suficiencia de tu producción.
Incluso pueden ser los que te van a hacer perder más tiempo en el inicio de la lactancia, justo el momento más delicado en el que necesitamos que todo se haga lo mejor posible en todas las posibles situaciones que se puedan presentar.
Porque luego, entonces sí que no habrá tiempo suficiente para recuperar la lactancia perdida y tendrás que rendirte a conformarte con la lactancia que tengas.
Solución:
Si te preparas a conciencia, buscando el sitio adecuado donde hacerlo, encontrando una tribu que te cuente sus experiencias, madres de gemelos como tú, podrás adquirir con antelación todas esas cosas que esperas que otros hagan porque les corresponde.
Tendrás seguridad que tu inicio será siempre el mejor que puedas, de acuerdo a lo que te toque en cada momento.
En todas las situaciones. Buenas y no tan buenas.
Todo lo que puedas aprovechar ahora para prepárate y venir a los grupos de apoyo será tiempo a tu favor.
Podrás controlar todo mucho mejor, y decidir sin miedo sobre cuestiones clave, porque reconocerás los obstáculos que se presentan por ti misma, lo que no te hará desviarte de tu rumbo, a lo sumo, buscar una ruta alternativa durante un tiempo para llegar segura.
No pierdas tiempo
Puedes solicitar ya tu entrada en la Preparación de lactancia materna de Gemelos Al Cuadrado, donde además de la formación que tienes preparada en el Grupo tendrás un acompañamiento exquisito incluso desde la distancia, con grupos mensuales muy parecidos a los que puedes encontrar en los grupos de apoyo a la lactancia materna.
Todo eso me faltó a mi y mira que leer leía, pero toda la información trate de recabarla por mi cuenta, no se me ocurrió buscar ayuda para este tema. Así me pasó… prematuros que comenzaron con lactancia mixta por bajo peso, poco o ningún asesoramiento en el hospital y todo se viene encima de golpe. Al final se convirtió en un suplicio y tiré la toalla.